Blogia
Asamblea Izquierda Unida de Candelario

Izquierda Unida. Pudo ser Peor

Izquierda Unida. Pudo ser Peor

No creo ser un tipo pesimista, tampoco optimista, me gusta estar pegado al suelo y quien me conoce dice que soy bastante realista. No sé si lo conseguiré pero voy a intentar ver las cosas como han ocurrido, naturalmente desde mi punto de vista que es el de un militante de base que, voluntariamente, ha renunciado a cualquier galón que como te descuides te quieren colocar.

Entré en Izquierda Unida cuando se constituyó. Durante todos estos años no he militado en ningún partido político, sólo en Izquierda Unida. Y lo he hecho cuando el 95% de Izquierda Unida era del PCE y sigo aquí ahora que la fuerza del mismo, como se ha visto en la IX Asamblea es del 45%.

Izquierda Unida ha tenido a lo largo de estos 21 años de existencia, altibajos, (más bajos que altos) hasta llegar a la situación actual. A la mala situación actual. Ya sé que hay a quien le gusta echar la culpa al otro, pero aquí o la pasión pone venda en algunos ojos o todos deberíamos reconocer que todas la sensibilidades --aunque yo entienda que una más que otras-- tenemos culpa. Unos no fueron capaces de ponernos a la altura a la que deberíamos llegar, otros nos subieron y luego nos bajaron a toda leche, y otros no sólo no nos han subido sino que estamos en el sótano.

Se ha llegado a esta asamblea después de un fracaso electoral total y con un enconamiento fuerte entre las familias. Y, sin embargo, no todo ha sido malo. A pesar de que se llegó con varios documentos a la Asamblea, pocos hubiéramos apostado hace sólo tres días que iba a salir un sólo documento político. En este punto, finalmente, se había llevado a cabo lo que la militancia de base había pedido: que nos pusiéramos de acuerdo.

Esto hizo presagiar que algo estaba cambiando. Un documento único era un signo inequívoco de unidad en lo más importante, el análisis de la situación y en el "qué hacer". Que no es poco.

Sin embargo quedaba ver quien debía comandar la nave en el futuro inmediato. Una cara, un nombre. Un reto, a mi modo de ver, menos importante en clave interna --siempre se podría haber elegido una dirección colegiada--, pero también entiendo que en este mundo donde cada día se hace más patente "el miedo a la libertad" del que Fromm hablaba hace ya casi setenta años, hace que se necesiten líderes donde agarrarse y sobretodo una imagen, un rostro con el que identificarse para bien o para mal. Y esto es lo que no han sabido hacer los delegados de esta asamblea.

Como suele ocurrir, nos hemos vuelto a mirar el ombligo, a luchar hacia dentro, cuando lo que hace falta es salir fuera y anteponer, al personalismo, la obligación. Porque señores delegados de la asamblea y queridos dirigentes es vuestra obligación poneros de acuerdo, y si no, marcharos, dejad el puesto a otros. No vendría mal una renovación después de ver las listas que se han presentado. La mayoría de los mandamases ya habéis fracasado, dejad que entre savia nueva, no os creáis imprescindibles. Ya está bien. ¿O es que habéis hecho de la política vuestra profesión, en contra de lo que propone esta organización? ¡Cómo cuesta soltar el sillón!

Estamos en la prórroga, dentro de un mes o dos se reunirá el nuevo Consejo, y ésta si que es la última oportunidad. Esta sociedad, ese millón de votantes y todos los que se han abstenido esperando este cambio, y los que han votado últil por desconfianza hacia nosotros, están esperando que cuatro (es un decir) se pongan de acuerdo y empiecen a trabajar. ¡Que hay tajo, compañeros! Que no está el horno para bollos.

Y espero que ese documento político aprobado por todos, encuentre el timonel, porque no se puede esperar más. Que fuera, dentro y en medio empezamos a hartarnos. Y el que no quiera, o pretenda seguir tocando las narices para mantener unas formas propias de otra época o para mantenerse en la poltrona que se vaya y deje trabajar a los demás. Así de claro. Sí alguien o algún grupo pretende estar por encima de la organización y que esta gire en torno a él, siendo incapaz de ponerse de acuerdo, ¡que se vaya! En esta organización no sobra nadie, pero sí sobran los personalismos, sean individuales o colectivos.

No me asusta el hecho de que se haya aplazado la decisión. Lo que me da susto es que llegue el día en que se reúne el Consejo y no se haya avanzado. Es la última oportunidad, al menos así lo veo. Este plazo corto de tiempo ha de servir para ponerse de acuerdo, éste es el mandato de la militancia. No se puede salir con un coordinador que represente el 51% contra el 49 restante. Hay que buscar una persona de consenso y ponerse a trabajar, dentro y fuera.

Y nada más, sólo agradecer a la gente que ha seguido esta asamblea desde IloveIU o esta bitácora porque se ha demostrado que la política y en concreto Izquierda Unida, sigue interesando. Se han multiplicado las visitas por más de ocho en estos dos días, leyendo las entradas que hemos sacado sobre la Asamblea. Y además, hemos recibido felicitaciones por el trabajo realizado, todos los blogs que hemos seguido este acontecimiento desde la blogosfera de IloveIU. Gracias, muchas gracias a todos los que nos han seguido.

Salud y República

Extraído de http://rafa-almazan.blogspot.com

0 comentarios