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Asamblea Izquierda Unida de Candelario

IU valora que el nuevo descenso del PIB muestra la ineficacia de buena parte de las medidas de Rodríguez Zapatero seis meses después de tomadas algunas de ellas.

El secretario federal de Economía y Trabajo de Izquierda Unida, José Antonio García Rubio, valora que la confirmación por parte del INE de un descenso del PIB del 4,2% en el segundo semestre, junto a los datos que reflejan el mayor descenso del consumo y la inversión, “muestran sin ningún género de dudas que nos encontramos ante una grave crisis de demanda, con un diagnóstico equivocado por parte del Gobierno y con una batería de medidas decididas por José Luis Rodríguez Zapatero que se muestran como ineficaces e insuficientes”.

 

El dirigente federal de IU considera que “con estos datos se hace cada vez más necesario un cambio profundo de la política económica del Gobierno y su plasmación calar en el proyecto de los Presupuestos Generales del Estado para 2010”.

 

“Los ‘brotes verdes’ con los que el Gobierno lleva desde hace meses autoilusionándose  y tratando de ganar tiempo son en realidad líneas rojas que señalan y marcan una situación muy dura para millones de personas”, señala García Rubio.

 

“Las veleidades del PSOE para atender con especial premura y fondos las reclamaciones de la Banca, su racanería con los parados y quienes han agotado todas sus prestaciones y las tentaciones de ceder a una reforma laboral involucionista deben ser definitivamente arrinconados. Las medidas eficaces para paliar la crisis deben corresponderse con un diagnóstico serio que,  hoy por hoy, no es el del Gobierno”.

 

“Hay elementos complementarios –añade García Rubio- que son muy preocupantes. Por ejemplo, las rentas salariales disminuyen un 2,6%, agravando la caída del 2,1% del trimestre anterior, algo que el Gobierno parece pasar por alto tan preocupado como está en anunciar tiempos mejores cuando no tiene hechos los deberes a día de hoy”.

 

Para el responsable económico de IU, “los descensos de determinados indicadores como el consumo final de los hogares o la demanda nacional en su conjunto, así como la inversión en construcción, son la demostración de que las medidas de estímulo del Gobierno no son eficaces, algunas de ellas después de llevar seis meses desde su puesta en marcha en ese segundo trimestre ahora señalado”.

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